LOS NIÑOS DESDE LA MATERNIDAD CON SEGURIDAD
Cuántas veces nos paramos en la puerta de un hospital, clínica, maternidad y vemos a las madres que salen con su criatura envuelta, protegiéndola de gérmenes, miradas, intemperie, etc., es que los niños son altamente vulnerables a ese nuevo escenario que les ofrece la vida: El aire, la contaminación, las personas; Hasta hace pocas horas, estaban resguardados en el vientre materno, protegidos y seguros, en mamá, pero qué le ocurre a esa madre que muchas veces al salir del nosocomio, decide subir a un taxi, remis, o el auto familiar y el niño, va... ¡EN BRAZOS!, no se da cuenta que lo está exponiendo a un riesgo, no solamente innecesario, sino evidente, tangencial, determinante en caso que algo no salga bien.
La intensión de este artículo no es llamar a la tragedia. Nadie espera que vaya a pasar algo malo en un momento tan feliz en la vida de una familia, el tema es, justamente preservar esa felicidad con acciones responsables. Los imprevistos existen, no se pueden controlar ni predecir; Lo que si cada familia puede contralar y decidir es salir lo mejor librado posible ante uno de esos imprevistos como que el que se cruce una moto, una ambulancia, un peatón, algo que haga que el vehículo en el que se circula, frene de golpe.
¿Un frenazo puede afectar a mi bebé? ¿Pero si lo llevo protegido en mis brazos?
El amor es una gran fuerza, una hermosa energía, pero el amor de madre no puede contra las leyes de la física: Cuando un vehículo avanza, el bebé adquiere energía (cinética), es decir, el vehículo se detiene pero quienes lo ocupan seguirán viajando a la velocidad que tenía el vehículo, es cuando ese niño puede convertirse en un cuerpo de 100 kg. ¿Somos capaces de retener ese peso con nuestros brazos?. Cuando ocurre un frenazo esa energía se suelta toda junta y si NO está contenida - por medio del cinturón de seguridad en el caso de los adultos-, protegida en un SISTEMA DE RETENCIÓN INFANTIL (SRI) – En el caso de los bebés y niños-, no hay amor de mamá y papá que pueda con los 100 kg en los que se transforma su bebé.
En países desarrollados, es obligatorio que el niño salga de la maternidad con un Sistema de Retención Infantil; En Sudamérica tenemos una deuda pendiente en materia normativa, la pregunta es a vos como mamá, como papá: ¿Necesitas que te obliguen a llevar a tu hijo seguro, para llevarlo seguro?
Acompáñanos en nuestra campaña para que los niños, cada día, viajen más seguros, porque queremos que de las maternidades los niños salgan seguros desde su primer viaje, por ellos, por nosotros. Por vos.
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